Sierpe, una calle mutilada y humillada


La calle Sierpe según el plano de Bentura Seco de 1738

Tradicionalmente se daba este nombre a una calle que iba desde Orates (hoy Cánovas del Castillo) hasta la plaza del Salvador. Su nombre le vendría por el trazado estrecho y sinuoso que presentaba, aunque otros opinan que se debía a una serpiente labrada que decoraba una de sus casas, probablemente  una posada.
Su trazado, además de sinuoso, era mucho más largo que hoy en día. Al abrirse en el siglo XIX la calle de Regalado, la calleja quedó dividida en dos.

Tramo denominado Calle Castelar
El primer tramo, que conserva su nombre, constituye hoy un callejón sucio y olvidado entre altas edificaciones. Muy distinta es la segunda parte, conocida actualmente como Castelar.

La calle Sierpe en la actualidad constituye un callejón sucio y olvidado entre altas edificaciones.

Objeto de la remodelación urbana decimonónica, constituye uno de sus rincones mejor conservados, sobresaliendo por encima de todo una auténtica joya: el Pasaje de Gutiérrez, calle comercial acristalada que une la de Castelar con Fray Luis de León. 



Comentarios

EnBuenaLid ha dicho que…
Te invito a que te pases por el post que en su dia colgué sobre esta misma calle.

http://enbuenalid.blogspot.com.es/2010/11/calle-sierpecopla-y-asesinato.html

Muy grande tu blog,como siempre!
Un saludo.
Patricia Meseguer ha dicho que…
Fue una de las primeras cosas de la ciudad que me enseñó mi chico. Muy curiosa. Lo que no sabía es que antes era más larga. Me encanta el detalle de la serpiente en el suelo, es genial!!!