Derribados los mercados del Campillo y Portugalete, subsiste el del Val. Los tres fueron proyectados en 1878, durante la alcaldía de Miguel Iscar.
La necesidad de edificarlos venía de antes. En 1862 el arquitecto Martín Saracíbar presentó proyectos de dos mercados, para las plazuelas del Portugalete y de la Red (detrás del Ayuntamiento). Los planos llevan la fecha de 14 de mayo de 1862, y nos ofrecen la imagen de un edificio poco funcional, en el que priva lo decorativo. La Junta Superior de Policía, estimando que eran pequeños y carecían de solidez, los rechazó.
En el expediente referente a estos mercados que obra en el archivo del ayuntamiento, figuran varias trazas del nuevo proyecto para los tres, redactado por el arquitecto municipal J. Ruiz Sierra, con fecha 31 de enero de 1878.
En la memoria que se adjunta, se hacen consideraciones en torno a lo que representan estos edificos, pero poniendo a París por imagen, y singularmente a los mercados centrales (Los Halles Centrales).
El plano del Portugalete diseña el aspecto de un circo romano. La línea es ya muy severa, se emplea el hierro, se mantiene el recinto bien ventilado con cortinillas de láminas de hierro inclinadas para que no entre el sol ni la lluvia. Figura también diseño en color de la gran linterna que había en el mercado del Val, que fue retirada. Se ven los cristales de colores rojo, verde y morado, que daban una alegría notable al recinto. En el diseño se ve el anagrama RS, que corresponderá al arquitecto Ruiz Sierra.
El mercado constituye un edificio alargado, con los extremos cerrados en forma semicircular. Lástima que haya sido retirada hace tiempor la monumental linterna, con vidrios de colores, que vemos en la fotografía publicada por González García-Valladolid. Tiene disposición cruciforme. Cuatro puertas se sitúan en los extremos de los ejes, y una fuente se sitúa en el cruce de éstos.
Un elevado zócalo de cantería y ladrillo permite el arranque del ventanaje de celosía matálica, que garantiza la buena aireación. Se sostiene mediante columnas de función. Toda la estructura interior de cubierta es metálica.
En las cabeceras figura el nombre del Mercado y la fecha de 1882, en que se construyera. Desaparecidos los otros mercados, éste subsiste como testimonio de una época de gran prosperidad para la ciudad.
Fue retocado en 1900, cuando se desmontó su gran cúpula central.
No volvería a sufrir ningún cambio en su aspecto hasta 1981, cuando fue restaurado por completo, adquiriendo su aspecto actual.
La necesidad de edificarlos venía de antes. En 1862 el arquitecto Martín Saracíbar presentó proyectos de dos mercados, para las plazuelas del Portugalete y de la Red (detrás del Ayuntamiento). Los planos llevan la fecha de 14 de mayo de 1862, y nos ofrecen la imagen de un edificio poco funcional, en el que priva lo decorativo. La Junta Superior de Policía, estimando que eran pequeños y carecían de solidez, los rechazó.
En el expediente referente a estos mercados que obra en el archivo del ayuntamiento, figuran varias trazas del nuevo proyecto para los tres, redactado por el arquitecto municipal J. Ruiz Sierra, con fecha 31 de enero de 1878.
En la memoria que se adjunta, se hacen consideraciones en torno a lo que representan estos edificos, pero poniendo a París por imagen, y singularmente a los mercados centrales (Los Halles Centrales).
El plano del Portugalete diseña el aspecto de un circo romano. La línea es ya muy severa, se emplea el hierro, se mantiene el recinto bien ventilado con cortinillas de láminas de hierro inclinadas para que no entre el sol ni la lluvia. Figura también diseño en color de la gran linterna que había en el mercado del Val, que fue retirada. Se ven los cristales de colores rojo, verde y morado, que daban una alegría notable al recinto. En el diseño se ve el anagrama RS, que corresponderá al arquitecto Ruiz Sierra.
El mercado constituye un edificio alargado, con los extremos cerrados en forma semicircular. Lástima que haya sido retirada hace tiempor la monumental linterna, con vidrios de colores, que vemos en la fotografía publicada por González García-Valladolid. Tiene disposición cruciforme. Cuatro puertas se sitúan en los extremos de los ejes, y una fuente se sitúa en el cruce de éstos.
Un elevado zócalo de cantería y ladrillo permite el arranque del ventanaje de celosía matálica, que garantiza la buena aireación. Se sostiene mediante columnas de función. Toda la estructura interior de cubierta es metálica.
En las cabeceras figura el nombre del Mercado y la fecha de 1882, en que se construyera. Desaparecidos los otros mercados, éste subsiste como testimonio de una época de gran prosperidad para la ciudad.
Fue retocado en 1900, cuando se desmontó su gran cúpula central.
No volvería a sufrir ningún cambio en su aspecto hasta 1981, cuando fue restaurado por completo, adquiriendo su aspecto actual.
-Fuente: Monumentos civiles de la ciudad de Valladolid. pOR JJ. Martín González. ISBN: 84-500-8462-8
-Fuente: http://www.funjdiaz.net/basefotos3.cfm?Pagina=6&Orden=num&ID_lugar=297
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